Los niños buscan una nueva forma de aprender, están pidiendo a gritos con su no interés, su mal comportamiento, que lo que los adultos hacen no tiene que ver con su esencia.
Nosotros nos hemos comunicado con el lóbulo izquierdo del cerebro, y ellos utilizan los dos, por eso son creativos, naturistas, prácticos e intuitivos.
Ellos tienen un comportamiento imaginativo, constructivo, experimental, cooperativo y trascendente.
Debemos dar nuevas herramientas que vayan más allá del aula, de la enseñanza estricta del cuaderno con los trazados lineales.
Tenemos que apuntar a lo multidimensional con el experimento asociativo.
Y por sobre todas las cosas darles todo el amor posible sin dejar de mostrar que somos adultos con autoridad.
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